Cuauhtémoc Méndez (México, 1956-2004)
Lástima, Eusebio,
que no hayas tratado de llegar más allá
de un simple faje con Rosario.
Lástima para tí,
porque viéndolo bien sé que te duele.
A mí también me duele
que hayas pasado sabrosa noche entre sus piernas
y que tu sudor y su sudor mezclados mojaron la sábana.
Pero sábelo, amigo,
y de una vez para que ya no te entretengas:
aunque ella quiere a Víctor
y contigo derrochó sus caricias,
esta muchacha cuando está conmigo
deviene en río de rosas
que se materializan en mis manos.
Réquisitoire
-
"*Quant à l'anti-humanisme il fallait que l'on y arrive. Le bain de sang
dans lequel nous barbotons a assez duré. On ne peut décemment pas appeler
human...
Hace 2 semanas
No hay comentarios:
Publicar un comentario